
•Se recomienda esperar hasta los 21 años para realizarse la reconstrucción mamaria
Anyelin Campos
acampos@elsoldeoccidente.com
Las malformaciones o la asimetría en los senos de las mujeres, se pueden dar debido a varias causas, principalmente una mayor respuesta de la hormona sexual estrógeno en una de las dos mamas, o en otros casos se deben a una malformación originada en el estado embrionario.
Lo que provoca que niñas o adolescentes experimenten una diferencia en el tamaño de sus pechos, provocando sentimientos de inseguridad.
Para corregir esta condición física, una de las primeras soluciones a la que acuden las mujeres son los implantes mamarios; sin embargo, antes de entrar al quirófano, los médicos recomiendan que la paciente tenga entre 18 y 21 años de edad, cuando el tejido y los senos hayan crecido. Si se realiza antes de tiempo, se corre el riesgo de que el tejido provoque problemas con cicatrizaciones.
Andrés Tapia, cirujano plástico y miembro de la Asociación Costarricense de Cirugía Plástica, Estética, y Reconstructiva informó que, los implantes no sólo sirven para aumento mamario, sino también para mejorar la asimetría de los senos que pudo verse alterada a lo largo del desarrollo o inclusive desde el período embrionario, debido a que la glándula mamaria se forma desde ese momento, pero se hace visible en la pubertad con el desarrollo del tamaño y forma de los senos.
“Es muy difícil, casi imposible que los dos senos sean iguales. Al principio del crecimiento es muy frecuente que las adolescentes tengan un seno más grande que el otro, mientras desarrollan. Si la deformidad o la asimetría es muy severa y se sabe que no se va a corregir, entonces se puede intervenir pero es muy importante dar un tiempo prudencial cuando son jóvenes”, agregó el especialista.