Andrés Castro | acastro@elsoldeoccidente.com
SAN JOSÉ. Diciembre llega siempre con el anhelado aguinaldo. Ese ingreso adicional que para las personas que tienen la fortuna de darle un uso diferenciado a los gastos corrientes o de fin de año, puede traducirse en una inversión.
Por ley, los empleados del sector público y privado en Costa Rica, recibirán un dinero proporcional a un salario mensual, siempre y cuando hayan permanecido por al menos 3 meses trabajando en la misma empresa u organización.
“Más que un regalo de temporada, el aguinaldo es una herramienta que deberíamos considerar para construir estabilidad financiera a largo plazo, pues con planificación y prudencia, cada colón puede contribuir a un futuro más próspero», manifestó Dexter Mena, director de Administración de Finanzas en la Universidad Fidélitas.
Una de las opciones que recomiendan los expertos en finanzas, es destinar dinero para establecer un fondo de emergencia. Este “colchón financiero” servirá como salvavidas en aquellas situaciones imprevistas, de índole personal o familiar.
No se deje llevar por la efervescencia propia de las actividades de fin y principio de año, si bien es normal destinar dinero para regalos y compartir con seres queridos, evite excesos y gastos innecesarios.
Si le está haciendo frente a una deuda, haga aportes considerables, y por encima de todo, haga números, defina metas claras y cumplibles en el corto y mediano plazo.
Si luego de hacer cuentas sus gastos en diciembre están al borde de los ingresos, considere la posibilidad del financiamiento con tasa cero, ya que está libre de intereses, y es ofrecido por algunas tarjetas de crédito e instituciones crediticias.
Otra valiosa recomendación del BN Vital, es invertir parte del aguinaldo en el plan voluntario de pensiones. Con ello se acelera significativamente este ahorro con un impacto en la mejora de la pensión a lo largo del tiempo. En otras palabras, aumenta más rápidamente debido a la capitalización compuesta, los rendimientos generados por la inversión comienzan a generar a su vez nuevos rendimientos.
“Al aprovechar la estrategia inteligente de invertir parte del aguinaldo en un Plan Voluntario de Pensiones, los trabajadores no solo experimentan una capitalización compuesta y beneficios fiscales, sino que también construyen una mejor reserva financiera, más robusta, garantizándose un camino más sólido hacia una jubilación más segura y próspera. Es hacer que su aguinaldo trabaje para su futuro financiero”, expresó José Angel Díaz, gerente comercial a.i. de BN Vital.
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