Un nuevo activo entra al escenario de la motivación.
En una popular red social hice la siguiente pregunta: “Tu jefe te llama a su oficina y te propone un incentivo ligado a tu productividad: Un aumento de ¢100 mil mensuales o un día libre a la semana. ¿Cuál elegirías?”
Hace algunos años me encontraba en una ceremonia religiosa presidida por un misionero en África, nos contó una anécdota interesante, solía pasar por una esquina en donde era común observar a un grupo de aldeanos participando de una amena tertulia, uno de ellos se le acercó y le dijo: “Admiro mucho todo lo que ustedes han logrado, tienen vehículos para ir de un lugar a otro, medios de comunicación para enterarse de lo todo, teléfonos inteligentes y tecnología para hablar entre ustedes, pero ya no conversan, llevan ese aparato en sus muñecas en el que han logrado capturar el tiempo y así poder controlarlo, pero desde entonces han dejado de tenerlo y es él quién los controla”.
Hay un tiempo idóneo que debes emplear para dormir, ejercitarse, masticar, meditar, lavarte los dientes, bañarte y muchas otras tareas, nos hemos acostumbrado a agendar prácticamente todo sin que ningún miembro de la familia se escape, no importa la edad que tenga.
Los cursos sobre administración efectiva del tiempo proliferan pero llevarlo a la práctica se convirtió en un verdadero arte, es un recurso finito y no puedes acumular el sobrante.
Un 51.3% de los participantes de la encuesta del párrafo inicial eligieron la segunda opción, a ti, ¿cuál te motiva más?, con el dinero obtienes cosas y con tiempo experiencias, el mendigo querrá dinero y el rico querrá tiempo, el Millennials querrá tiempo, el X se inclinará por el dinero, el niño olvidará de adulto los regalos de sus padres, pero recordará los momentos que juntos pasaron.
La vida es al final de cuentas un abrir y cerrar de ojos, haz que cada minuto valga la pena, porque el activo más valioso de una persona es sin duda el tiempo, no puedes regresar el reloj y cambiar el pasado, pero puedes aprovechar el presente y regalarte a ti y a tus colaboradores la oportunidad de agendar al día, un espacio para dejar de mirar el reloj.
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