
Los edulcorantes no calóricos son aditivos de los alimentos que se utilizan como opción para reducir el consumo de azúcares y la ingesta energética total. Sin embargo, y a pesar de su alta popularidad, aún se mantiene el debate en torno a los beneficios reales para las personas, sobre todo en pacientes con obesidad o diabetes.
Por eso, un grupo de expertos de la Asociación Latinoamericana de Diabetes (ALAD) se dio a la tarea de analizar las investigaciones más recientes sobre este tema para aclarar las dudas al respecto. Los resultados se publicaron en la Revista ALAD, en octubre anterior.
Los científicos concluyeron que los edulcorantes no calóricos son útiles como herramientas que ayudan en el tratamiento o prevención de la obesidad cuando se consumen en sustitución de azúcares. Para ello, es fundamental contar con la supervisión de un experto en nutrición, para elaborar un plan de comidas que limite el consumo de carbohidratos y energía. De esta manera, los aditivos funcionarán realmente como sustitutos.
En el caso de pacientes diabéticos, los expertos confirman que el consumo de estos edulcorantes no calóricos genera un menor aumento de los niveles de glucosa en sangre que los azúcares comunes. De igual forma, su ingesta debe estar regulada con una dieta baja en carbohidratos para aprovechar sus beneficios, tanto para el control de la glucosa como para proteger la salud cardiovascular.
De acuerdo con los expertos, estos aditivos no afectan el apetito ni la sensación de saciedad. Además, son seguros para niños y mujeres embarazadas.