
Quiero hacer un viaje en la historia, pensé en alguien que fuera conmigo y llegaste tú. Viajemos juntos hacia dos mil años atrás.
Un día un rayo del Espíritu Santo iluminó a tres hombres que se dice eran reyes y sabios, y ellos vieron una estrella que nunca habían visto. La siguieron llenos de esperanza, con alegría y con fe; esa estrella los guiaría hasta el Hijo de dios hecho hombre; pues así reza la sagrada escritura, se dice que caminaron 14 o 15 días para llegar al sitio donde Jesús nació.
Yo caminé 35 años para que Jesús hecho hombre me encontrara y me sacara de los infiernos donde yo vivía, yo no tenía oro, ni incienso, ni mirra. Yo solo tenía un gran dolor de toda mi historia, esa era mi cruz, era mi ambición, mi lujuria; y este Niño que vino a salvar a los pecadores, me dio oro por mi ambición, incienso por mi lujuria y mirra para que me conservara dentro del plan de Dios.
Hace algunos años puso Jesucristo a una dama en el camino, igual que a esos Tres Reyes Magos, la puso a caminar, iluminada por la luz del Espíritu Santo, para que pudiera ver a Jesús hecho hombre, nacido no en un pesebre, ni en una cuna, sino en el corazón de esta mujer. Ella no le llevó nada y Él le dio el perdón de sus pecados, la hizo perdonarse a si misma y pedir perdón, ella pudo lograrlo a través de la oración.
Mujer sigue orando, sigue pura y consérvate como la mirra, porque ambos sabemos que la cruz iluminada se hace gloriosa.
Te amo en Cristo y te deseo que los Reyes Magos te den oro, incienso y mirra, para que seas salva tu y toda tu familia.
Un abrazo para todos los tuyos
Lolito